Sesión 17

Arte Underground

Estos artistas se apoyaron en los medios de comunicación y en los objetos de la vida cotidiana para ofrecer un concepto nuevo. La publicidad, los cómics, los supermercados y, en conclusión, los nuevos símbolos del consumismo norteamericano fueron su punto de partida para llegar al público reacio al arte. Con la creación de la revista Interview el arte llega hasta el último rincón de la América profunda. Sus "enemigos" fueron cambiando durante sucesivas décadas: si bien en los 60 y 70 reaccionaron artísticamente contra un público adormecido, en los 80 mostraron socialmente los nuevos problemas: el racismo, la homosexualidad, el SIDA...
El Underground fue un movimiento muy heterogéneo. Con el nuevo estilo pop-art las pinturas se llenaron de objetos usuales y casuales ilustrados con colores salidos de los tebeos para niños, y retratando para la posteridad a los mitos del siglo XX. A su vez, el cómic y la música se hicieron más sucios, con la inestimable colaboración de Robert Crumb y de la Velvet Underground respectivamente, que crearon imágenes y sonidos adelantados a su tiempo. Por otra parte el teatro alcanzó sus más altas cotas de mugre con el happening, una clase muy especial de actuación con interacción del público, y las películas se hicieron hiperrealisatas hasta el vómito, buscando veracidad por encima de todo, sin reparar en la duración o la calidad de los actores.
Andy Warhol Enriqueció el arte culto con los símbolos de la publicidad de masas, llenó los libros de arte con anuncios propios de las revistas del corazón, y pintó a los dioses de su tiempo y la realidad cotidiana de los EE.UU. de los años 60.






 

 

GLAM

Durante la primera mitad de la década de los setenta, surgió en el Reino Unido una escena de rockeros distintos, que complementaban su música con una puesta en escena y una estética muy particular. Pintura, luces, lentejuelas vistieron al glam; para algunos, una tendencia; para otros, un movimiento."Se podría decir que el glam rock era esencialmente divertido. O al menos lo era durante aquella época, porque años mas tarde adquirió un aspecto
serio y algo negativo, lleno de yuxtaposiciones posmodernas, códigos significativos y otras tonterías similares. Ahora vuelve a ser divertido, aunque con ciertos lastres. Aún recuerdo con inmenso placer a muchos albañiles que se animaron a ponerse leotardos y se contoneaban arriba y abajo por la calle, después de que los sabelotodos como yo les asegurasen que un poquito de colorete atraía a las chicas". David Bowie.